Los cenotes del sureste mexicano ofrecen distintos aspectos de interés, que los hacen únicos desde una perspectiva geográfica y una visión turística.
En primer lugar, se deben tomar en cuenta los tesoros naturales relacionados con su formación.Pero además, también hay que considerar, el enorme simbolismo que tenían estos cuerpos de agua, para los antiguos mayas, los varios rituales y ceremonias que ellos practicaban en estas inundadas cavernas del sureste mexicano.
Ese es el motivo por el cual, los cenotes mexicanos son igual de atrayentes para los aficionados al ecoturismo, los apasionados por el submarinismo y la natación y los interesados en el turismo cultural, en específico el arqueológico.
Uno de los cenotes más representativos de los que se pueden hallar, recorriendo los caminos de la Península de Yucatán, es el cenote Bolonchojol.
Se encuentra en el centro del estado de Yucatán, muy cerca de la comunidad de Cuzamá.Se trata de una de las maravillas naturales de Yucatán.
Mucha gente gusta de visitarlo, para sumergirse en sus cristalinas aguas, tomar fotografías de su misterioso entorno y aprovechar los servicios turísticos que se han montado en sus alrededores. El cenote Bolonchojol pertenece a los Cenotes de Cuzamá, por lo cual, al visitarlo, también se podrán conocer otros 2 hermosos cenotes.