{En el marco de la pandemia de coronavirus que está afectando al mundo se han generado algunos fenómenos curiosos y en cierto sentido hasta alarmantes.

Por la gran alteración que han sufrido en su vida cotidiana millones de personas debido a la expansión del Covid 19, se entiende que mucha gente realice compras de pánico. }

Y si bien, hasta cierto punto, es comprensible que se adquieran en grandes cantidades detergentes, desinfectantes, alimentos no perecederos y jabones, no hay una justificación racional a la compra exagerada de papel higiénico.

¿Por qué se ha producido este raro fenómeno social? Primero se agotaron en el mercado los cubre bocas.

Posteriormente los productos desinfectantes para las manos. En la actualidad lo que escasea, sorprendentemente es el papel higiénico. Es un acontecimiento sin sentido que conviene analizar con detenimiento. La verdad es que se trata de un producto de higiene personal que no nos ofrece alguna protección especial contra el virus Sars CoV2. El papel sanitario no está considerado como un elemento indispensable en casos de emergencia a gran escala, como sí lo serían la leche o el pan.

Tomando en cuenta lo anterior, ¿por qué la gente está comprando rollos de papel sanitario a un ritmo tan poco inteligente y sin sentido práctico? Ciertos especialistas en psicología clínica señalan que en el marco de pandemias como la que estamos experimentando las personas suelen comportarse a modo de un pánico generalizado.

El caso es que el coronavirus es un agente infeccioso bastante nuevo y las personas aun desconocen bastantes de sus detalles. En ocasiones el público escucha mensajes contradictorios acerca de los riesgos que tiene el Covid 19 y el modo en el que deben de protegerse ante este microorganismo.

Es por ello que suelen caer en excesos como la compra masiva de papel higiénico.

Otra posible razón, comentada por especialistas en piscología y políticas públicas, tiene que ver con las cuarentenas implementadas en muchas naciones del mundo.

Las personas ante una acción pública de este tipo no saben como actuar, los funcionarios de salubridad no son lo suficientemente claros al respecto y los ciudadanos tratan de adivinar cuál es el modo correcto de prepararse ante un confinamiento de varias semanas.