El monasterio virreinal que se encuentra en Acolman, es uno de los más antiguos del país y el atractivo más importante que tiene el lugar.
Fue construido para evangelizar a los indígenas de la región, por los religiosos agustinos. En este edificio destaca especialmente, el atrio, además de las numerosas pinturas y esculturas novohispanas que allí se atesoran.Y aunque la proyección arquitectónica del monasterio puede ser un tanto intimidante, por sobria y monumental, esto se compensa por la hermosa fachada plateresca de la iglesia anexa.
Por lo demás, San Agustín Acolman se deja disfrutar con sus antiguas tradiciones, costumbres pintorescas y la rica gastronomía que allí se cultiva.