Para los niños, nada más atractivo que las fiestas infantiles y para gozar de su mágico ambiente, sobresale Party Land.

La tienda es múy aprovechable para cualquier ocasión especial, ya que cuenta con más de 6 mil artículos. Quienes visitan este lugar, quedan maravillados por su hechizo sin igual. Avenida San. Jerónimo 630, colonia La Otra Banda.

Para quienes tengan gratos recuerdos de sus juguetes predilectos de la infancia, entonces recomendamos el magnífico Museo del Juguete Antiguo, donde pueden hallarse 30 mil piezas de colección.

Son juguetes de diferentes épocas que incluyen barcos, muñecas, trenes y muchas otras cosas de gran interés. Doctor Olvera 15, colonia Doctores.

Quienes de pequeños fuimos a Reino Aventura, en el Ajusco, y saludamos al dragón Cornelio, entonces sin duda que disfrutáremos de su versión contemporánea: Six Flags, uno de los parques de diversiones más grandes, completos e importantes de nuestro país.

Carretera Picacho-Ajusco, colonia Héroes de Padierna.

Es tiempo de comentar acerca de la Feria, con su iconica montaña rusa que tiene 40 años en funcionamiento.

Imposible no recordar como en la adolescencia uno subía a esta atracción, y apenas bajando de ella, agitados y entusiasmados, ha queríamos subir de nuevo. Segunda Sección del Bosque de Chapultepec.

Deliciosos y dulces sabores que nos despiertan recuerdos de la niñez.

Eso justamente es lo que nos brinda la chocolatería mexicana evolutiva Que Bo! Allí se puede probar chocolates con sabor a Boing de guayaba, chicle motita de plátano, chamoy y muchos más. Julio Verne 104B, colonia Polanco.

Si eres de esas personas que extrañan sus ositos de peluche, entonces te aconsejamos conocer la tienda Build a Bear, en dónde te dan la oportunidad de fabricar tu propio muñeco com tal material e incluso te proporcionan su acta de nacimiento.

Galerías Coapa, calzada del Hueso, 519, local 329

Para chicos y grandes, un sitio excelente por la mucha cultura que nos puede ofrecer, es el Museo del Estanquilllo, en Isabel La Católica 26, centro.

En este museo, el inolvidable Carlos Monsivais, nos lego su vasta colección de pósters, afiches, libros de historietas y muchos otros divertidos tiliches, que hoy en día se encuentran en exhibición.