Viajar a Andalucía y contar con la guía de una agencia que proporciona casas de alquiler de lujo en todos los pueblos de Andalucía es todo un privilegio al alcance de unos pocos.
Sobran razones para veranear en Andalucía, un lugar lleno de sorpresas, hospitalario, y en el que sus habitantes siempre están dispuestos a dar lo mejor de si mismos.
El turismo de lujo tiene un papel muy destacado en esta comunidad autónoma española, donde cuenta con una agencia que es todo un referente en su sector, Amarante LVA Costa del Sol que pone en alquiler viviendas de lujo en todos los pueblos de Andalucía.Todos los rincones de la Costa del Sol están cargados de vida, sus pueblos blancos rezuman historia y vivencias y el paisaje es precioso, con sus largas playas en las que disfrutar del mar y los baños de sol.
Las aguas transparentes del mar y la arena fina de la playa invitan a disfrutar al máximo del contacto con la naturaleza,a demás de las verdes laderas llenas de vegetación que las rodean y si hay algo que destaca es el clima del lugar, con una media al año de 19º.
La Costa del Sol cuenta con 15 municipios costeros En la Costa del Sol, más de 160 kilómetros de costa esperan a muchos turistas cada año y los servicios se han diversificado para dar respuesta a todo tipo de visitantes, desde familias a singles que esperan disfrutar de las noches más trepidantes. Los turistas se sienten como en casa en el litoral andaluz, que en el caso de la Costa del Sol cuenta con 15 municipios costeros.Las mansiones de lujo son el mejor punto de partida para disfrutar de este paisaje inigualable al que se le suma una rica gastronomía, cuyo eje son los productos frescos del mar y de la tierra, así como una cultura viticultora de las más diversas del mundo.
Campos de golf, clubs náuticos y tiendas de lujo ponen la guinda a un lugar en el que nadie se puede sentir extraño. El mundo de la aviación está estrechamente ligado al poder adquisitivo Los aviones privados aterrizan continuamente en el aeropuerto de Málaga. Uno de ellos el del cantante Julio Iglesias, que año tras año visita la costa en la que dice encontrarse como en su propia casa. El mundo de la aviación es apasionante y cuenta con una página web de referencia por la que estar informado de todo cuanto acontece en él, por ejemplo que Embraer, los fabricantes de aviones de Brasil han vendido nada menos que 210 aviones durante el pasado año 2017, 101 aviones de pasajeros para compañías aéreas y 109 jets privados. España es un país con poca flota de jets privados, y además aún existe cierto pudor al tener que reconocer que se cuenta con uno. Empresarios como Emilio Botín, del Banco de Santander o Vicente Boluda, la cabeza visible de la naviera Grupo Boluda, viajan en su jet privado, pero hay muchos más.En los demás países europeos, la flota aérea privada es más grande, como es el caso de Italia, Francia, Alemania o Reino Unido.
A los dueños de estos jets, que también son una herramienta de trabajo, les basta con llamar por teléfono para disponer su vuelo, mientras el resto de los mortales están sujetos a horarios, desplazamientos codo con codo con sus compañeros de pasaje e interminables colas.Pero a la hora de volar no hay privilegios, el cielo aéreo está totalmente democratizado e incluso la imagen de recoger en coche a un viajero de un jet privado nada más bajar del avión, ya ha quedado para las películas.
Estos deben trasladarse como el resto de las personas, porque si hay un mundo estructurado donde todo debe de funcionar a la perfección milimétrica, estos son los aeropuertos.