Hay variados estilos de vida, tantos como temperamentos y preferencias pueden hallarse.

Algunos de ellos podrían parecernos extravagantes, otros asombrosos, pero para quienes los asumen les ofrece un cierto sentido de libertad que no cambiarían por nada.

Para comprender lo anterior basta con pensar en las familias viajeras, grupos de personas que han decidido abandonar sus hogares, actividades laborales e incluso han sacado a sus hijos de sus escuelas, para lanzarse a los caminos para tener las más variadas experiencias.

Los padres de familia, cuando se quedan sin dinero durante su trayectoria se dedican a realizar trabajos sencillos, como vender cuadros o artesanías, pero lo mejor de todo es que no deben pagar de manera fija luz, gas, predial, etc.

Estas familias nunca pasan más de cuatro días en un mismo lugar y suelen alojarse en casas de familiares o de gente que ofrece alojamiento a un costo muy bajo.

Ciertos países se han preocupado por la educación de los hijos de las parejas que gustan de tener un estilo de vida viajero.

Por ejemplo, en Argentina, el Ministerio de Educación de la Nación ha preparado un Servicio de Educación a Distancia (SEAD) que le da la oportunidad a los chicos de familias viajeras de tomar el plan de estudios oficial a la vez que se trasladan con sus padres de un lugar a otro.

Una de las familias viajeras más famosas es la de los Zapp, que han viajado por diferentes continentes y comparten sus experiencias en las redes sociales y en su canal de YouTube.