Morelos es una invitación permanente para explorar la cultura y la historia de su geografía. Una de las mejores vías para hacerlo, es a través de la Ruta de Zapata. Los viajeros más perceptivos, abren sus sentidos a las calles de la capital Cuernavaca, a los senderos que se internan en los cerros, a los cimientos de sus edificios históricos, relacionados con los pasos del caudillo, Emiliano Zapata.
Emiliano Zapata fue uno de los caudillos más importantes de la Revolución Mexicana (1910-1917). En 1994 se convirtió en el ícono del movimiento zapatista en el sureste mexicano. Viajeros nacionales e internacionales han visitado México con el interés de conocer los lugares por los que transitó este emblemático personaje que se levantó en armas en 1911 bajo el lema de “Tierra y libertad”.Los invitamos a seguir la ruta de Emiliano Zapata, a través de algunos de los sitios más representativos de la geografía morelense. 1. Anenecuilco, Morelos. Visita la casa de adobe, ahora conocida como Museo Casa Zapata, donde Zapata pasó su infancia. 2. Tlaltizapán, Morelos. En este sitio, Zapata vivió momentos muy activos de su lucha. Hoy es un museo donde se exhiben interesantes objetos de la Revolución Mexicana. 3. Cuautla, Morelos. Aquí podrás viajar en el tiempo cuando visites la estación de tren y las maquinas de vapor. Todos los días se hacen pequeños recorridos por las vías. También puedes visitar el Palacio Municipal, donde el 10 de abril de 1919 fueron expuestos al público los restos de Zapata, que había sido asesinado la víspera. 4. Hacienda de la Chinameca, Cuautla, Morelos. Una intensiva restauración ha convertido a esta airosa hacienda en el Museo del Agrarismo. En este sitio fue emboscado y asesinado Zapata. 5. Pabellón Turístico Emiliano Zapata, Ayala, Morelos. Aquí podrás disfrutar de un tiempo agradable en familia admirando las áreas verdes y divirtiéndote en los juegos infantiles y el balneario “El Axocote”. 6. Hacienda San Antonio Cuahuixtla. Los muros, arcos y la gran chimenea o chacuaco que quedan de esta hacienda son el testimonio del gran esplendor que llegó a tener esta propiedad que abarcó más de cinco kilómetros.
Siguiendo la ruta de Emiliano Zapata se puede uno enamorar de lo mejor del turismo morelense.