Te presentamos las actividades (básicas) que no puedes dejar de realizar durante tu próxima visita a la “Perla de Occidente”. ¡Toma nota y captura la esencia de la orgullosa capital de Jalisco!

1.

Conocer su catedral y los principales edificios de su Centro Histórico

Recientemente elegida por nuestros usuarios como una de las cinco catedrales más espectaculares de México, la de Guadalajara es uno de los edificios más emblemáticos de la capital jalisciense.

Su construcción inició en 1561, pero no fue sino hasta 1874, cuando le fueron agregadas sus famosas torres forradas de azulejo (luego de que un terrible sismo derribara las originales en 1818).

No dejes de admirar su hermosa fachada de estilo renacentista, así como las interesantes obras pictóricas que aloja en su interior (te recomendamos buscar un lienzo de la Purísima Concepción, obra del artista español Murillo).

Caminando por calles cercanas, encontrarás el Palacio de Gobierno, que alberga un espectacular mural del padre Hidalgo y, más adelante, el Teatro Degollado, donde el “padre de la patria” declarara la abolición de la esclavitud en 1811. Finalmente, no puedes dejar de conocer el Hospicio Cabañas, imponente construcción hoy convertida en un estupendo centro cultural, considerado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y que en su interior, resguarda una serie de murales pintados por el artista José Clemente Orozco. No dejes de admirar el mural “el hombre en llamas”, que decora una de bóvedas más altas de la Gran Capilla Mayor, ¡te sorprenderá!

2.

Probar unas ricas tortas ahogadas Platillo referente de la región, las tortas ahogadas consisten en un pan (o birote), relleno de carne (maciza de puerco, lomo o pierna), bañando en una rica salsa de jitomate y chiles, que es la que le da su original color y presentación distintiva, “mojada”.

En Guadalajara es fácil encontrarlas en prácticamente cada esquina; todo restaurante, local y hasta numerosos puestos callejeros, las ofrecen a cualquier hora del día.

No dejes de saborearlas acompañadas con un refresco o una deliciosa agua de horchata.

3.

Visitar el municipio vecino de Zapopan Ubicado al noroeste de Guadalajara (a tan sólo 16 km del Centro Histórico), Zapopan es un bello municipio famoso porque en su plaza principal se levanta una de las construcciones religiosas más importantes del estado de Jalisco: la Basílica de Zapopan.

Con su elegante fachada a dos cuerpos, y dos grandes torres rematadas por originales cúpulas en forma de gajos, este templo aloja, como máximo tesoro, a la Virgen de la Expectación, muy venerada por cientos de fieles que, a partir del 12 de octubre, la celebran entre música, bailes y rezos en el marco de sus fiestas anuales.

Si vas a Guadalajara, no puedes dejar de visitar Zapopan y conocer ahí la milagrosísima imagen de su patrona.

4.

Comprar artesanías en Tonalá o Tlaquepaque Al sureste de Guadalajara se localizan dos municipios de gran tradición: Tlaquepaque y Tonalá. En estas poblaciones, además de poder saborear lo mejor de la gastronomía de Jalisco, también podrás adquirir hermosas artesanías, en cientos de locales y puestos ambulantes, ¡a muy buenos precios! En el centro de Tonalá, incluso, tendrás la oportunidad de entrar a uno o varios talleres para presenciar cómo las hábiles manos de los artistas locales (y de los alrededores), dan vida a verdaderas obras de arte en materiales tan variados como el barro, vidrio, latón, piel o hasta metales preciosos.

Si te gustan las artesanías, estos dos municipios son puntos obligados durante tu viaje por tierras tapatías.

5.

No perderse un partido de futbol… ¡en vivo!

Guadalajara es una plaza muy futbolera.

Aquí, juegan dos de los 18 equipos de la primera división del futbol nacional: el Guadalajara y el Atlas. Si eres un verdadero fanático de este deporte (aunque no le vayas a ninguno de estos clubes), no puedes dejar de ir a un partido y disfrutarlo “en vivo” en cualquiera de sus dos magníficos estadios ubicados en el área metropolitana de la “Perla de Occidente”: el Jalisco, escenario de dos copas del mundo, y “refugio” de los zorros o “rojinegros” del Atlas, y el nuevo y majestuoso Estadio Omnilife, el moderno hogar de las Chivas Rayadas, uno de los equipos más populares del futbol mexicano. ¡Vive la pasión del "juego del hombre", al estilo Jalisco!