En el siempre dinámico y variable entorno de la cocina mundial, la cocina mexicana es admirada por sus polifacéticos sabores, gran colorido y original mezcla de frescos ingredientes. De entre sus numerosos platillos, de entre los antojitos más representativos que incluye, destacan los tacos. Este sencillo alimento se perfila como una auténtica  joya culinaria que ha cruzado fronteras y conquistado el paladar de comensales en todo el mundo.

Tomando en cuenta lo fascinante de esta temática, amerita profundizar más a fondo acerca de ella. De modo que comentaremos más, en lo que sigue, acerca de la relevancia de los tacos mexicanos en el marco de la cocina internacional del siglo XXI.

Los orígenes de los tacos

Las raíces gastronómicas de los tacos se remontan a las culturas precolombinas de mesoamérica. Se sabe que los mexicas consumían tortillas de maíz con relleno de diminutas presas obtenidas en las cacerías. Con el paso del tiempo, tales tradiciones alimenticias evolucionaron, se añadieron nuevos ingredientes y surgieron novedosos procedimientos de preparación.

Los tacos se perfilan como un platillo de gran versatilidad, capaces de adaptarse a una gran variedad de gustos y preferencias. La base fundamental es la tortilla, misma que puede ser de maíz o de harina. La elección de la tortilla influye significativamente en los sabores y las texturas de los tacos.  Mientras que maíz aporta un sabor terroso y una textura más firme, la harina ofrece un toque más suave y flexible.

El relleno de los tacos mexicanos

Otro distintivo especial de los tacos es el relleno. Hay clásicas alternativas de relleno como el pollo, carnitas y carne asada, hasta opciones más modernas como tofu o pescado. La variedad de opciones resulta prácticamente ilimitada.

La carne, por lo general, se sazona con una mezcla de especias que puede incluir chiles, ajo, cumin y cilantro, proporcionando ese sabor auténtico que hace que los tacos sean inconfundibles.

El taco mexicano en el entorno gastronómico internacional

En las décadas más recientes, los tacos se han consolidado como uno de los platillos más asociados a la mexicanidad en el escenario mundial. La combinación de sabores, la frescura de los ingredientes y las posibilidades tan grandes de personalización son factores que han posibilitado su enorme popularidad.

Y así, desde las pintorescas calles de la capital mexicana hasta los restaurantes más exclusivos de Nueva York, los tacos han hallado un sitio en la escena gastronómica de nuestro tiempo. En el territorio estadounidense, por ejemplo, las influencias de la cocina típica mexicana han creado un auténtico “culto” gastronómico al taco.

En efecto, los food trucks y restaurantes especializados en tacos se han multiplicado, ofreciendo opciones que van desde los clásicos hasta las interpretaciones más modernas y creativas. La cultura del taco ha trascendido las barreras culturales y se ha convertido en un fenómeno gastronómico que une a personas de todas las edades y orígenes.

Los tacos y su adaptación a la cocina mundial

A la vez que los tacos se han ido expandiendo por el orbe, han sifo objeto de distintas adaptaciones en las diferentes zonas geográficas en donde se les prepara. En el continente asiático, por ejemplo, es posible hallar versiones de tacos con rellenos de carne porcina al estilo tailandés o coreano, enriquecidas con sabores propios de esta parte del mundo.

En el continente europeo, innovadores chefs han logrado colocar a los tacos a inéditos niveles, al combinar ingredientes locales de diferentes naciones de aquella zona del orbe con la esencia más pura de la mexicanidad. Tacos con relleno de salmón ahumado y aguacate, o de cordero con hierbas provenzales, son solo algunas muestras de cómo los tacos se han integrado de armoniosa manera en la escena gastronómica europea.