Uno de los destinos más sobresalientes de la llamada Ruta de Sor Juana, a lo largo del Estado de México, Ozumba destaca sobre todo por sus riquezas arquitectónicas virreinales y sus gratas tradiciones.
Quien visita Ozumba parece trasladarse a una dimensión diferente, en donde antiguas costumbres de vida y el entorno de pureza silvestre de la región, son las constantes principales.El nombre del lugar, se deriva del bello idioma náhuatl, en específico del término Oztompan, el cual se compone del vocablo ?Oztotl?, cuyo significado es ?cueva? y de ?Pa? que significa ?lugar?.
Oztompan referiría entonces al ?lugar de las cuevas?.Dentro de sus atractivos turísticos más importantes- incluyendo los alrededores-, hay que señalar el exconvento franciscano de la Purísima Concepción de María, la Parroquia de San Vicente Ferrer, y los cascos de las haciendas de Atempa y Actopan.
Ozumba no solo se constituye, desde un punto de vista turístico, como un sitio de gran interés dentro de los muchos pueblos y municipios que integran el Estado de México, sino que, además, sobresale como un depositario de antiguas tradiciones de inmensa valía folclórica y cultural.
Además el entorno natural de Ozumba es perfecto para quienes gusten del campismo, el rappel, el senderismo y los almuerzos campestres. Qué visitar en OzumbaSu singular localización geográfica, en pleno sistema volcánico transversal, le otorga un ambiente muy sugestivo.
De tal suerte que, entre visiones de niebla y bajo el amparo del gran Popocatépetl, se nos ofrecen en Ozumba, tesoros coloniales como el monasterio franciscano del siglo XVI, cuya construcción finalizó en 1590, dedicado a la Virgen de la Purísima Concepción.Por otra parte, en el barrio de San Francisco se levanta la capilla novohispana consagrada a San Francisco de Asís.
Este edificio sacro destaca por mantener sus detalles arquitectónicos originales: muros de piedra, torre, bóveda y un noble campanario. En el interior de la iglesia, existe un hermoso retablo barroco y diversas composiciones al óleo que abordan la vida de personajes religiosos y diferentes episodios de la Biblia.Ozumba también cuenta con un verdadero caleidoscopio de colorees, olores y sabores en su tradicional tianguis.
Este mercado ambulante se instala, semana a semana, los días martes. Con el tiempo se ha constituido en uno de los tianguis más exitosos de la región, puesto que allí ofrecen sus mercancías y productos, comerciantes de Morelos, Puebla, Tlaxcala, la Ciudad de México y la veintena de municipios que incluye el Estado de México. El tianguis de Ozumba resulta valioso además, porque preserva costumbres mercantiles anteriores al siglo XVII-justo cuando comenzó a ser instalado-, por ejemplo, a través de la costumbre del trueque, sin duda, una reminiscencia del México prehispánico.Al sur de Ozumba se encuentra San Vicente Chimalhuacán Chalco, comunidad que cuenta con un notable complejo conventual dedicado a San Vicente Ferrer.
Este edificio fue edificado en 1528 por los religiosos dominicos. El bautisterio del lugar aún atesora la pila bautismal en donde fue bautizada Juana de Asbaje y Ramírez, es decir, Sor Juana Inés de la Cruz, el 2 de diciembre de 1648. Es la pila bautismal más admirable del periodo novohispano. Cómo llegarPartiendo desde la Ciudad de México se toma la carretera No 115 México-Cuautla, que inicia desde la autopista México-Puebla.
Luego se sigue la desviación que se presenta a la altura de la Caseta de Chalco y se continúa rumbo al sur, cerca de 30 km, cruzando a través de Chalco, Tlalmanalco, Amecameca, hasta arribar a la desviación que nos lleva a la cabecera municipal de Ozumba. Información relevanteEn Ozumba existe un pequeño sitio al que los lugareños nombran como las Pozas de Atzinco.
Paraje con gratos brotes de agua, es habitual ver a los habitantes de Ozumba paseando por ese lugar encantador. Es especialmente recomendable para desarrollar días de campo y excursiones familiares. Un encantador paraje del Estado de México. Actividades a realizar en las cercanías de OzumbaEn las proximidades de Ozumba se localiza el pueblo de San Mateo Tecalco, que se caracteriza por sus idílicos paisajes, con campos de flores de las más variadas: nube, alelí, crisalia, etc.
En las proximidades del Día de Muertos, las parcelas de San Mateo Tecalco se tiñen de amarillo, con la melancólica proyección de las flores de cempoalxóchitl.