Cerca de treinta millones de turistas que visitan México cada año así lo avalan: nuestro país es, ciertamente, un destino turístico bastante mágico. ¡Pero es que además contamos con nuestros queridos pueblos mágicos, de los que tanto hablamos en este sitio web! A continuación, le presentamos cuatro de los pueblos mágicos más populares del país, para que no se pierda entre una oferta turística tan extensa.

Papantla

Papantla destaca por un aspecto muy particular, especialmente delicioso: la vainilla, tan popular hoy en día en productos como el aceite esencial de vainilla. Este vibrante pueblo perteneciente al Estado de Veracruz es el lugar donde la vainilla se dio a conocer al mundo europeo tras la invasión por parte de los conquistadores de los pueblos indígenas del Golfo.

La ciudad también alberga a los Voladores de Papantla, que celebran una ceremonia de tipo religioso en la que intervienen tambores, flautines, chamanes y personajes ataviados con elaborados disfraces bajando por un madero muy largo al tiempo que van dando vueltas sobre unas cuerdas. Cabe destacar también que, en Papantla, también se encuentra El Tajín, una ciudadela formada por pirámides francamente muy bien conservadas.

Comala

¿Le apetece disfrutar de una naturaleza realmente impresionante? No se hable más: visite Comala. A una hora y media en carro desde la costa del océano Pacífico, esta localidad presume de unas calles adoquinadas, edificios encalados evocadores, botanas para chuparse los dedos, un ponche local delicioso y panorámicas del volcán de Colima que le dejarán sin aliento (¡aún activo!). Y si le apetece todavía una dosis extra de magia, no puede perderse la conocida como “zona mágica”, donde se realizan trucos que desafían a la gravedad y que resultan realmente alucinantes.

Tequila

¿Qué sería de un viaje a México sin dejarse embriagar por su elixir más preciado? Tequila es, además del nombre de la bebida más conocida de México, uno de los pueblos mágicos más hermosos. Como podrá imaginar, Tequila tiene una tradición insuperable en la destilación de la tequila y muchos de sus atractivos turísticos giran en torno a ella. Por ejemplo, marcas de reputación mundial como José Cuervo o Sauza tienen su hogar en el pueblo mágico de Tequila. Y, atención, porque la destilería La Rojena, parada obligatoria en su visita, lleva en pie funcionando más de 200 años.

Tepoztlán

Esta breve lista no estaría completa sin alguna referencia a la tradición espiritual milenaria de México. La tradición cuenta que en Tepoztlán nació el Quetzalcóatl, la deidad más venerada por el pueblo azteca. El influjo de la serpiente sigue ejerciendo fascinación sobre los turistas. Parte del encanto de Tepoztlán es que ha conseguido conservar su cultura indígena (náhuatl). También nos ofrece unos paisajes preciosos rodeados de acantilados que le dan un toque más mágico si cabe a este enclave. Sobre la ciudad se erige todavía hoy imponente una pirámide azteca, que nos invita a una excursión inolvidable. Recuerde que Tepoztlán está menos de dos horas en carro de Ciudad de México. No hay excusa, pues, para no visitar este pueblo mágico.