Descubriendo la historia en Teotihuacán
Existen muchos lugares de interés en las cercanías de la Ciudad de México y varios de ellos tienen una justa fama internacional.
Uno de ellos es la antigua ciudad de los dioses, el sitio arqueológico de Teotihuacán. Resulta tan vasto y formidable, que se compara sin problemas a la ciudad de Machu Picchu en el Perú o a la ciudad de Petra, en Jordania. Por ello, es uno de los puntos imperdibles para quien tenga el deseo de conocer los sitios prehispánicos de mayor relevancia no solo en el Estado de México, sino también a nivel nacional.Teotihuacán es un destino aconsejable para visitar durante el fin de semana, por localizarse a solo 50 kilómetros de la capital del país.
Se trata de la ciudad más grande que existió en Mesoamérica, y de la cual se conservan enormes pirámides que son sumamente admiradas en todo el mundo. De entre las más sobresalientes tenemos la Pirámide del Sol, la Pirámide de la Luna y el Templo de Quetzalcóatl. Pero además, los visitantes tienen la oportunidad de observar coloridos murales, realizados por los antiguos habitantes del lugar, los cuales nos dejan saber los hábitos y costumbres que ellos tenían.Pero, pensando también en los pequeños viajeros, además de visitar este extraordinario sitio arqueológico mexiquense, te sugerimos también gozar de otras atracciones de la zona.
Por ejemplo, se tiene la posibilidad de volar en globo aerostático, viajar en un divertido tranvía turístico, conocer el parque temático Reino Animal y el enorme Jardín Didáctico de Cactáceas.Para quienes deseen aprender más acerca de la antigua cultura teotihuacana, aconsejamos visitar también el Museo de Sitio de Teotihuacán y el Centro de Estudios Manuel Gamio.
Para culminar de buena manera este paseo, nada mejor que degustar sabrosas especialidades de la gastronomía mexicana e internacional, en el restaurante Las Pirámides, localizado en la misma zona prehispánica. Y así, mientras se disfruta de deliciosos alimentos, se tiene una magnífica vista de las pirámides de Teotihuacán, construcciones sumamente valoradas a nivel mundial.Si se decide hacer un paseo de fin de semana a Teotihuacán, es conveniente hacerlo en el mes de marzo, justo para presenciar el Equinoccio de Primavera, el día 21.
Y es que se toma como una verdadera fiesta cósmica, con mucha gente vestida de blanco, deseosa de cargar energía en lo alto de estos nobles monumentos.Es importante que los visitantes lleguen temprano, para evitar excesivas acumulaciones de gente, el quemante sol del mediodía y para recorrer lo más posible del yacimiento, puesto que se trata de un sitio de grandes dimensiones.