El Rosario Pueblo Magico Sinaloa
Mazatlán, en el estado de Sinaloa, es actualmente la principal vía de acceso marítimo entre México y Asia, con su puerto multipropósito que lo mismo recibe cruceros turísticos que enormes buques de carga. Gracias a su cercana ubicación y a la riqueza de sus minas y esteros, el Pueblo Mágico de El Rosario desde hace mucho tiempo ha operado como un trampolín para la consolidación de este puerto. Es por ello que, desde el siglo XVII, ambos lugares han gozado de una relación casi simbiótica.
Actualmente, la pesca cuenta con un alto nivel de desarrollo en la zona. En las áreas costeras de la región se hallará una gran variedad de especies como lisa, róbalo, pargo y curbina, entre muchas otras, que pueden capturarse en los embalses interconectados de Agua Verde, Chametla y la Laguna El Caimanero.
Esta última es una de las playas productoras con mayor abundancia de camarón de estero a nivel mundial.
Qué visitar en El Rosario Pueblo Mágico
La mayoría de los Pueblos Mágicos tienen en su centro histórico tesoros que hablan por sí mismos a las nuevas generaciones sobre sus épocas de esplendor; en centro histórico de El Rosario se pueden apreciar las casas señoriales de quienes fueran las familias más prósperas, así como también. el Palacio Municipal con su plaza y su kiosko, una estatua dedicada a la famosa cantante Lola Beltrán y por supuesto, la parroquia de Nuestra Señora del Rosario, reconstruida de 1934 a 1954 prácticamente piedra por piedra, pues la original colapsó por la explotación de la Mina del Tajo, que quedó llena de socavones.
El Panteón Español es uno de los lugares más representativos de El Rosario, pues en él se albergan las historias de cientos de pobladores ilustres.
En el Museo de Historia Regional de El Rosario, construido en lo que antiguamente fuera la Cárcel Municipal, se puede conocer más sobre este y otros personajes rosarenses, además de las raíces y consolidación del pueblo.
El archivo histórico de este museo, consta de fotografías que muestran el desarrollo de la región a partir de 1865. Esta colección incluye imágenes de la gente del pueblo hasta sacerdotes y gobernantes, así como el esplendor arquitectónico de las construcciones rosarenses.
Lo imperdible en El Rosario Pueblo Mágico
El Museo Comunitario de Chametla, ubicado en una finca de principios del siglo XX junto a la Parroquia de San Pedro, concentra el pasado remoto del pueblo a través de una colección de piezas arqueológicas que incluyen artefactos de piedra o cerámica, utilizadas para uso doméstico, ritual o productivo, como malacates, cuencos de cerámica, figuras zoomorfas y antropomorfas, y urnas mortuorias que muestran un estilo particular.
Otras comunidades importantes de la región de El Rosario son El Pozole, Agua Verde, Los Ojitos y La Niebla, por su prolífica actividad ganadera, agrícola y pesquera.
En Matatán, cada Semana Santa, tiene lugar la representación de uno de los Viacrucis más antiguos del país, que data de 1700 y se ha convertido en toda una tradición de la localidad, pues todos los habitantes participan de una u otra manera para mantenerla viva; también en las fiestas de la Virgen de la Candelaria, las calles se visten de colores con los trajes de los matachines que van bailando al ritmo de la banda, bajo la luz de los fuegos de artificio.
Un sitio imperdible al visitar El Rosario es la comunidad de Cacalotán, que fue una importante productora de mezcal artesanal y cuerda de ixtle.
Se ubica junto al arroyo Pánuco, que en verano crece y riega las tierras, dándoles la humedad ideal para que prospere el agave.
La hacienda mezcalera, que también perteneció a don Ignacio Fletes, contaba con rústicas ruedas de molino que trituraban el "melchonte" o piñas de agave para extraer el destilado.
Después de la reforma agraria derivada de la Revolución Mexicana, las tierras fueron expropiadas y la hacienda tuvo que cerrar; donde antes hubo abundantes agaves, hoy han proliferado plantaciones de mango.
Por supuesto, una visita a El Rosario no está completa si no se goza la arena de sus playas bajo los pies.
En El Caimanero, los bañistas no solo disfrutan las frescas aguas de la laguna y la brisa del Pacífico, sino la deliciosa gastronomía derivada de los productos del mar.
La mayor parte del año se encuentra casi vacía, pero en temporadas vacacionales familias locales y foráneas acuden a nadar, acampar, pasear en lancha, pescar y convivir con la fauna marina.
La antigua entrada de la Mina del Tajo quedó inundada en 1935 por un tremendo ciclón que azotó tierras sinaloenses; el cuerpo de agua que nació de este cataclismo es ahora conocida como Laguna del Iguanero, que actualmente es un sitio de descanso y recreación rodeado de árboles y plantas tropicales.
El agua, que se ha tornado de verde, es hogar de varias especies de peces, tortugas, iguanas y patos; en su parte media, esta laguna tiene un puente colgante que conduce a una isla central, donde alguna vez se levantó la antigua iglesia del pueblo.
Qué comer en El Rosario Pueblo Mágico
La abundancia de frutos del mar le brindan a El Rosario una gastronomía disonante con la zona norte del país: camarones, pulpo, callo de hacha, lisa, robalo, huachinango, curvina, mojarra, pargo y burrito, son solo algunas de las especies que se pueden disfrutar en ceviches y aguachiles, además de platillos como pescado zarandeado con chicharrón de camarón, con calache de calabacitas, o con una ensalada de verduras frescas de la región.
Otro producto que hay que destacar en este Pueblo Mágico es el chorizo, preparado con carne de puerco molida y sazonada con chiles y especias, que sirve como base para deliciosos platillos típicos como el pozole rojo, el menudo, los tacos dorados y el asado a la plaza, con papa en cubitos, verduras cocidas y una exquisita salsa de tomate.
Por último, no se puede ir a Rosario y no probar el ToniCol, refresco típico y único sabor vainilla, con propiedades naturistas y muy refrescante y vigorizante.
Qué comprar en El Rosario Pueblo Mágico
Las localidades que integran El Rosario producen artesanías en materiales diversos, que obtienen de la naturaleza.
En Artesanías El Indio, del centro histórico, se pueden adquirir las piezas de alfarería y cestería de las culturas xixime, acaxe y totorame; para conseguir artículos singulares, vale la pena darse una vuelta por las comunidades: en Matatán, exquisitos muebles rústicos tejidos en palma y madera; en Cacalotán, conservas de mango deshidratado; y en la Loma de Santiago, una vibrante industria joyera con collares, pendientes y toda una gama de accesorios.