¡La mejor forma de tener buenas fotos! Para mi, no hay nada más vital en un viaje que el registro.

En mi lista de prioridades a la hora de empacar, mi cámara ocupa el primer lugar. No solo porque me apasiona la fotografía, sino porque no creo que haya una mejor forma de recordar, documentar y contar historias reales sobre un lugar. Por eso, estoy convencida de que la fotografía de viajes, puede ir mucho más allá de una selfie frente a un monumento histórico. Y no se trata de ser un fotógrafo profesional, simplemente se trata de abrir las perspectiva y seguir algunos consejos útiles para hacer de la experiencia fotográfica, un hecho revelador de rincones ocultos, personas maravillosas y culturas sorprendentes. No importa si tienes un celular o una cámara profesional, anota estos 10 consejos y prepárate para recibir aplausos y tener recuerdos inolvidables. Muchas de estas fotos, si no todas, fueron sacadas con un celular…así que no hay excusas. 1. Explora tu cámara

No importa si es un smartphone o una cámara profesional.

Si no tienes idea de cómo usarla, ¡investiga! Existen ahora incontables tutoriales que harán de la experiencia de fotografiar, algo más fácil. Además, entre menos tiempo pierdas por no saber como usar tu cámara, más oportunidades tendrás de obtener grandes resultados. 2. ¡A madrugar!

El ensayo y el error será una parte vital del proceso.

Por eso, si quieres una de esas fotos soñadas del amanecer tendrás que madrugar una y otra vez. Costará, pero al final, cuando logres capturar la belleza de un lugar con la maravillosa luz de la mañana, todo habrá valido la pena. 3. Haz las cosas diferentes

A todos nos gustan los típicos monumentos, las grandes estructuras y los rincones turísticos por excelencia.

Es normal y vale la pena conocerlos, pero es válido ser creativos. A veces, los planos, la iluminación, los objetos y las personas que menos crees, pueden ser el blanco de la foto perfecta. Lo más importante es ver cuáles son esos elementos que hacen parte de tu composición, integrarlos de la mejor forma o incluso esperar hasta que el plano que te llamó la atención esté libre de objetos o situaciones que dañen la armonía de la foto. 4. Piérdete

Recorre las ciudades, camina al azar.

Piérdete incluso en tu propia ciudad. Podrás encontrar joyas ocultas. Algunas de las mejores fotos salen de estar en lugares que parecen no ofrecer nada. Piérdete, pero siempre, siendo precavido y a horas en las que te sientas seguro. Especialmente si no conoces. 5. Interactúa

Habla con los lugareños.

Una forma de tomar grandes retratos es hablando con ellos y ganando su confianza. Al aprender de su vida y oír sus historias, ellos se sentirán cómodos y permitirán que los captures de una forma maravillosa. Habrá personas que te rechacen, pero no hay que tener miedo. Busca más y encontrarás linda gente e historias. 6. No necesitas una cámara costosa

He visto y he tomado fotos maravillosas con smartphone.

Con las aplicaciones que existen ahora, es muy posible tomar fotos al instante y editarlas para hacerlas espectaculares. Pero lo mejor, es que puedes compartirlas al mundo entero. Aplicaciones como Vsco, Snapseed y Enlight, además de Instagram, son buenas herramientas para resaltar lo mejor de las imágenes capturadas. 7. Cuenta historias

No hagas siempre lo mismo y cuenta historias de los lugares que recorres.

Retratos, paisajes y fotografía de alimentos ayudan a añadir profundidad a la narración. Intrígate por las cosas simples y ten la mente abierta. 8. Investiga un poco el lugar

Antes de ir a una zona remota, es bueno hacer una pequeña investigación.

Sobre el tiempo, los eventos, situaciones políticas, seguridad. Es mejor estar preparado. Pero recuerda, ten la mente abierta para llegar a lo más escondido y remoto de cada lugar. Como ya se dijo, cualquier persona puede visitar París y tomar una foto de la Torre Eiffel, pero no todos se atreven a desviarse para resaltar algo especial, inolvidable y escondido. 9. ¡Paciencia!

Muchas buenas fotos son el resultado de una gran paciencia.

Espera que la oportunidad se de. Los horarios son importantes, pues la luz de la tarde y de la mañana ofrecen ambientes perfectos para algunas fotos. Además, vale la pena intentar perspectivas que parecen extrañas, pero que al final, serán lo que buscabas. 10. Baja la cámara de vez en cuando

Parece irónico, pero bajar la cámara es uno de los principales valores de la fotografía de viajes.

¿Por qué? Porque la única forma de documentar un viaje es observando. No se trata de ver tu recorrido en una pantalla, se trata de reconocer, entender y vivir el lugar en el momento. La imagen será el complemento de la experiencia que vivirás en primera persona.