Hablar de sitios así, como las panaderías que mencionaremos a continuación, para mucha gente implica rescatar lo mejor de su infancia.

Se trata de negocios que tienen siglos de anécdotas históricas y tradiciones. Los habitantes de la Ciudad de México gustan de visitar panaderías como las siguientes para adquirir pan caliente y bizcochos para el desayuno o la cena. Vasconia

Se trata de una panadería-restaurante que abre sus puertas desde muy temprano y así lo ha hecho desde 1870.

Se considera que fue fundada por un panadero vasco emigrado al territorio mexicano. De entre los panes que son ya clásicos de su oferta destacan las conchas, polvorones, trenzas de higo, panqués, corbatas, chilindrinas y cuernos. Al tener más de 140 años de existencia, está considerada como la panadería de mayor antigüedad en la Ciudad de México.

Tacuba 73, colonia Centro.

El Molino

La historia de esta panadería capitalina inició en 1918.

Por aquel entonces Juan Servitje patentó una maquina especial llamada “Higiénica Múltiple Póo” el primer ingenio mexicano para elaborar bolillos. En 1941, El Molino fue remodelado por completo. Los parientes de Juan Servitje tuvieron tanto éxito y entusiasmo con el negocio del pan que con el tiempo crearon una fábrica de pan de caja, misma que dio origen al actual Grupo Bimbo. Lo mejor de El Molino son sus deliciosos pasteles.

16 de septiembre 59, colonia Centro.

Pastelería Ideal

Abrió sus puertas en 1927 y dese entonces ha vendido pan excelente en la capital mexicana.

Inició su actividad en plena guerra cristera y gracias a la calidad y sabor de sus pasteles y bizcochos se transformó en una de las más importantes panificadoras de la región. Mucha gente acostumbra comprar conchas, bisquets, panqués, mantecadas en este negocio, antes de ir a su trabajo y degustarlo con café con leche. Tiene una sección de pasteles tan amplia y variada que para muchas personas es un auténtico museo del pastel. Visita la Pastelería Ideal en República de Uruguay 74, Centro. Madrid

Inició su actividad en 1939.

Hace algunos años incluyó una sección de lonchería para que los visitantes pudieran allí comer un bizcocho con café o algún pan salado. De entre los panes más ricos que allí se elaboran son las mantecadas de vainilla, orejas, campesino, etc. Pero la especialidad de la casa son las conchas tamaño familiar. Una de ellas alcanza para tres o cuatro personas. A destacar la amabilidad de las encargadas del negocio. También expenden ricas galletas, gelatinas, pasteles y chocolates, además de un formidable cheesecake.

5 de febrero 25, colonia Centro.