En el año 1779 comenzó la edificación de un palacio de gran importancia. Esta tarea le fue encomendada al arquitecto Francisco de Guerrero y Torres, uno de los mejores en la Nueva España. La construcción finalizó en 1785 llegando a ser la única vivienda de cuatro niveles que había en el territorio novohispano durante el siglo XVIII.

Una vez que se completó la Independencia de México en 1821, un descendiente de los primeros propietarios, Juan Nepomuceno de Moncada, ofreció el palacio al líder del Ejército Trigarante, Agustín de Iturbide, para que le sirviera de residencia. Fue en ese edificio en donde el 18 de mayo de 1822 Iturbide apareció en el balcón del Palacio y se escuchó proclamar como Emperador de México. Por ello, el edificio terminó por ser llamado como Palacio de Iturbide.

A la postre, el Palacio de Iturbide fue comprado por el Banco de México, con el objetivo de rescatarlo como patrimonio arquitectónico virreinal. Las labores de restauración finalizaron en marzo de 1972. Con el paso de los años, fue reinaugurado como sede del Museo Palacio Cultural Banamex, en enero del 2004.

Este recinto museístico atesora aproximadamente 4,300 obras plásticas que incluyen creaciones de artistas como José Clemente Orozco, Doctor Atl, Frida Kahlo y Joaquín Clausell, así como también fotografías de Manuel Álvarez Bravo.

Visita este museo en la calle de Madero 17, Centro Histórico, DF. Para alojarte durante tus vacaciones en la Ciudad de México, te recomendamos el Hostal MX Coyoacán, una garantía de confort y descanso en el sur de la capital mexicana.