La ciudad de Guanajuato cuenta con una hermosa y antigua presa, la cual es accesible a través de un bello pasaje construido desde la época virreinal.

Sitio ideal para caminar, observar el atardecer, comer y disfrutar de la música tradicional.

La Olla esa una de las presas más antiguas de México,  fue inaugurada en 1747 y por su belleza, el intendente Juan Antonio de Riaño, levantó una de los paseos más glamurosos de México.

Con los años, ya en el siglo XIX, se edificaron mansiones de estilo victoriano que albergaban a las familias más prosperas del Bajío, las cuales solían pasear alrededor de la presa.

La presa de la Olla cuenta con un amplio parque y un malecón que reúne a enamorados y familias que esperan con tranquilidad la puesta del sol.

Asimismo, se ofrece la renta de lanchitas que permiten dar un plácido recorrido acuático. Entre las montañas, destaca un faro que, según los locales, es el único en el mundo que fue construido tierra adentro, el cual tenía por objetivo distinguir la ciudad de Guanajuato entre las montañas de la Sierra de Santa Rosa. Es posible acceder al faro a pie, desde donde se puede apreciar una de las vistas más formidables de la ciudad colonial

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