Sisal, Yucatán lugar lleno de descubrimiento y disfrute turístico
El fuerte de Sisal, con su pequeño e icónico faro, ha definido el panorama de esta comunidad yucateca durante siglos y en la actualidad se perfila como un atractivo más para los miles de personas que acuden a esta parte del sureste mexicano, en busca de motivos de descubrimiento y disfrute turístico.
Localizado a 76 kilómetros de la zona poniente de Mérida, Sisal se constituyó desde el siglo XVI en el puerto comercial de mayor relevancia en la península de Yucatán.
Por este mismo lugar se transportaban enormes cargas de mercancías, que partían con destino a todas las regiones de la Nueva España. De entre lo transportado sobresalían abundantes piezas de artillería para defender a las ciudades costeras novohispanas, de los frecuentes asedios de los piratas.De acuerdo a estudios históricos de gran prestigio, el puerto de Santa María de Sisal en cierta etapa estuvo considerado como el principal ingreso marítimo a la ciudad de Mérida.
De tal manera que la fortaleza colonial formó parte de las edificaciones destinadas a proteger la costa peninsular de los ataques corsarios. Los baluartes de Campeche y el fuerte de Bacalar, este último en territorio quintanarroense, se consideran como recursos defensivos similares utilizados por la corona española para proteger sus intereses en el continente americano, de los asedios piratas, muchos de ellos promovidos secretamente por Inglaterra.Los medios defensivos de Sisal, también se valían de varias trincheras de piedra suelta, en la actualidad desaparecidas.
Algunas referencias históricas señalan la existencia de otra fortificación, mucho más grande y poderosa, ubicada más dentro del monte y de la cual en nuestros días ya no queda ningún vestigio. Qué visitar en SisalSisal es una población pequeña y tranquila en donde habitan numerosos pescadores.
Es una comunidad yucateca de gente por demás amable y servicial con los turistas. Los turistas que lleguen provenientes de grandes ciudades hallarán especialmente entrañables sus pacíficas calles, así como también sus playas de arena clara y agua color azul-esmeralda. El oleaje que define a estas playas es de intensidad moderada, por lo cual se presta tanto para la natación, como para el descanso y la contemplación de maravillosos paisajes caribeños.En las zonas cercanas a las playas de Sisal, aparecen arrecifes coralinos, excelentes para la práctica del esnórquel o para el buceo en modalidad scuba.
También son muy agradables en estas aguas yucatecas, los recorridos en lancha y la pesca deportiva.La valía histórica de Sisal no solo procede de los tiempos prehispánicos, sino también de las construcciones coloniales que posee, justo en el centro del puerto.
Una de las más famosas es la Aduana Marítima, pero también importantes son el Fuerte de Santiago ?El Castillo?, el Faro, la Casa de la Emperatriz Carlota Amalia y los cañones localizados en el parque central, los cuales evocan la preocupación que tenían los antiguos habitantes del puerto, para defenderse de buena manera ante las acechanzas de los piratas ingleses. Cómo llegar a SisalSisal se encuentra al poniente del territorio yucateco, a unos 53 kilómetros de la ciudad de Mérida.
Para llegar allí aconsejamos tomar la carretera federal 281, desde la capital yucateca directo a la comunidad de Sisal. Información relevante acerca de SisalAconsejamos visitar en el marco de un viaje por Sisal, el llamado cenote, es decir, un ojo de agua oculto entre la selva baja de El Palmar, en donde los turistas pueden practicar la natación, teniendo cuidado de que no aparezcan cocodrilos en las cercanías.
También son atractivos los miradores, los cuales están construidos con troncos y desde los cuales se pueden avistar numerosas especies de aves, particulares de la zona de la ciénega. También son fascinantes de contemplar el llamado ?bosque petrificado? y los magníficos ocasos.{{{ Actividades a realizar en Sisal }}} Conviene entrar en contacto con los lugareños, para que nos conduzcan hacia algunas poco conocidas edificaciones de la cultura maya prehispánica.
Tales vestigios se encuentran ocultos en algunos parajes de la reserva El Palmar.De igual manera, aconsejamos mucho- aunque en este caso más a los aficionados al ecoturismo-, recorrer ciertas zonas de la vasta costa, en donde acostumbran desovar las tortugas marinas.
Se trata de tortugas de especies como la caguama, la de carey y la tortuga blanca.