{De vez en cuando la geografía mexicana se vuelve más generosa que de costumbre y con ello nos permite tener abundantes sorpresas turísticas.
Eso es lo que sucede, por ejemplo, cuando tenemos la oportunidad de visitar los Pueblos Mágicos de Veracruz para así gozar de sus tradiciones, paisajes naturales, costumbres y la hospitalidad de sus habitantes. }Los invitamos a emprender un ameno recorrido por los rincones más interesantes de Xico, comunidad veracruzana.
Xico es una comunidad que se caracteriza por su capacidad para cautivar a los turistas con sus antecedentes históricos, su gastronomía típica y sus usanzas artesanales.
Tan valioso es su patrimonio material e inmaterial que no resulta difícil comprender por qué le otorgaron a esta localidad la declaratoria de Pueblo Mágico de México.Xico se localiza a solamente 20 kilómetros de la ciudad de Xalapa, siguiendo la carretera que conduce a Coatepec.
Una recomendable logística para unas vacaciones en esta zona es alojarse en Jalapa y desde allí emprender paseos a Xico y otros sitios imperdibles de la región.Uno de los tesoros arquitectónicos de Xico es la Parroquia de Santa María Magdalena, una construcción en la que se combinan detalles neoclásicos y barrocos.
De hecho, es el edificio religioso más importante de la zona. Una de las festividades típicas más relevantes de Xico es la dedicada a la Santa Patrona de la comunidad y tiene lugar el día 19 de julio.Las celebraciones tradicionales en Xico exponen una interesante combinación de creencias precolombinas y veneraciones católicas.
Por lo que se refiere a la gastronomía que se cultiva en Xico y las poblaciones cercanas, esta incluye platillos como el chileatole, delicias de la panadería artesanal, y la sopa de frijol acompañada de la hierba xonequi.
En las proximidades de Xico hay una cascada que cautiva a los visitantes con su bella estampa.
Nos referimos a Texolo, un paraje que cautiva a los visitantes con tan solo visitarlo una sola vez. El acceso a este parque silvestre tiene un módico costo, pero bien vale la pena cubrirlo para admirar los lindos paisajes del siempre verde entorno y la caída de agua que allí se atesora.