Dedicarle un fin de semana al estado de Tlaxcala, específicamente para conocer sus tesoros culinarios, es una de las mejores experiencias que se pueden tener, especialmente para los aficionados al turismo gastronómico.
La cocina de Tlaxcala aparece fuertemente influenciada por la gastronomía española.
Y es que varios ingredientes españoles, en combinación con la comida precolombina, tradicional en lo que actualmente es Tlaxcala, hicieron aparecer platillos de exquisito sabor, color y aroma. Son habituales de la cocina tlaxcalteca, alimentos como el nopal, el maguey y varias hierbas del campo.Cuando disfruten de un fin de semana culinario en el estado de Tlaxcala, no dejen de saborear las ensaladas de nopales, lengüitas, quintillones y los llamados huevos de maguey.
De la misma manera, son imperdibles antojitos como los tacoyos de frijol, acoyote, haba o garbanzo, o bien, la sopa tlaxcalteca, que incluye tortilla frita y frijoles molidos.Varios de estos platillos preservan sus denominaciones originales y gran parte de ellos son del idioma nahuatl.
Ese es el caso de los mixiotes, por ejemplo, o las tlatlapas de frijol molido acompañadas de epazote y nopales. En Tlaxcala se puede disfrutar del caldo de habas con perejil; la sopa de flor de calabaza; la de hongos o la crema de huitlacoche.Para el caso de platos fuertes aconsejamos degustar el mole de pollo Tocatlán acompañado de nopales, el pipián verde con semillas de calabaza; el pollo al pulque; las deliciosas tortas de huazontle; las tortitas de amaranto o el mole de epazote.