Tan rico es el patrimonio turístico mexicano, que ciertos elementos particulares de su entorno geográfico, nos ofrecen un acercamiento global a la nación entera, en su cultura, naturaleza y antecedentes históricos.
Por ejemplo, es posible conocer cómo es México actualmente con tan solo recorrer sus playas: las hay con modernos complejos turísticos incluidos y otras en cambio, vírgenes y silvestres; unas están llenas de turistas y un gran dinamismo comercial, mientras que otras, por su tranquilo y solitario ambiente, son perfectas para el romance o el ecoturismo.
De la misma manera las haciendas de México nos ofrecen muchos elementos típicos de lo que define a esta nación latinoamericana de cara ante el mundo, en lo que se refiere a su historia, su naturaleza y sus más importantes manifestaciones culturales.