{Para la contención de la enfermedad Covid 19, una tercera parte de los habitantes del mundo debe seguir severas prácticas de confinamiento.

De manera temporal se han tenido que cerrar empresas, negocios, terminales aéreas e instalaciones deportivas.}

Una cuestión intrigante al respecto es la de saber por qué la situación actual no se presentó en otra gran pandemia que se vivió hace relativamente poco: la de la gripe H1N1 entre los años 2009 y 2010.

A esta enfermedad se le llamo también la gripe porcina y surgió de la mutación de un novedoso virus de origen animal que se contagió a los humanos, causando una enfermedad respiratoria considerada de gravedad.

El problema al comparar el virus Sars CoV 2 con relación a la gripe porcina es que el coronavirus tiene características de las que no se tenía registro y ante las cuales, por el momento, no tenemos otro recurso defensivo más que la cuarentena sanitaria.

El virus AH1N1- como en el caso del coronavirus- se transmite a través de las secreciones que expulsan las personas contagiadas al estornudar o al toser.

También por los contactos directos con individuos enfermos y que tengan secreciones en las vías respiratorias.

Estudios recientes han determinado que la gripe porcina eta dos veces menos contagiosa que el actual coronavirus.

La OMS calculó que un individuo con H1N1 pudo infectar a un promedio de 1.6 personas, mientras que alguien con coronavirus es capaz de infectar a un promedio de tres personas.

El índice de letalidad del coronavirus también es mayor al que tenía la gripe porcina.

Mientras que en un periodo de 16 meses la pandemia de gripe porcina dejo un total de 493 mil casos y 18 mil 600 fallecimientos, la pandemia de Covid 19 aun no ha cumplido tres meses y ya ha superado la cantidad de contagios y fallecimientos que los causados por el virus AH1N1. Mientras no se consiga una vacuna contra el coronavirus, algo en lo que se está avanzando con urgencia y con alentadores resultados en diferentes naciones, se tendrán que seguir medidas de precaución sanitaria para impedir más daños a la economía y la salud pública por el virus Sars CoV 2.