Único en México, este peculiar tren recorre la Sierra Tarahumara pasando por los bellos paisajes de Barrancas del Cobre hasta llegar a Sinaloa.

Con más de 50 años de tradición y al servicio de los chihuahuenses y sus visitantes, el peculiar tren Chihuahua-Pacífico, mejor conocido como Chepe por la abreviatura de su nombre (CH-P), es el único ferrocarril de pasajeros en México. Su misión es conectar al estado de Chihuahua con Sinaloa, además de ofrecer una experiencia inolvidable. Este magnífico transporte ferroviario recorre una de las rutas más espectaculares del mundo, no sólo por los majestuosos paisajes naturales que la definen, sino por la oportunidad de acercar al viajero a la cultura rarámuri, una de las más antiguas y mejor preservadas de México.

El Chepe inició su operación en 1961, tras 11 años de construcción y planeación.

Todos los días recorre en dos ocasiones la ruta de 650 kilómetros a lo largo de la Sierra Tarahumara y sus principales atractivos turísticos.

Cruzando nueve puntos en su camino, El Chepe inicia su recorrido a las 6 horas, todos los días del año.

Partiendo de la ciudad de Chihuahua, este ferrocarril se conduce por Cuauhtémoc, hogar de la comunidad menonita más grande del mundo; prosigue por Creel, Pueblo Mágico y poblado principal de la Sierra Tarahumara, donde lagos, valles, cascadas y aguas termales atestiguan la vida de la cultura rarámuri.

Su paso continúa por Divisadero, parada que corresponde a la hermosa vista de Barrancas del Cobre, extensión de cañones cuatro veces más grande que el Cañón del Colorado, donde también hay asentamientos importantes de comunidades tarahumaras, comida regional y venta de artesanías.

Aquí, se ofertan distintos servicios turísticos para quien desee pernoctar uno o varios días. En caso contrario, El Chepe brinda 20 minutos para la admiración del paisaje y continuar el recorrido.

Luego de sólo cuatro kilómetros, el ferrocarril encuentra el complemento de la parada anterior en Posada Barrancas, cuya distinta vista del grandioso paraje natural enamora al visitante.

Más adelante, la estación Bauichivo/ Cerocahui es el punto de partida para visitar el Cañón de Urique (el más grande de la ruta). A 45 minutos de aquí, el pueblo Cerocahui, con su Misión Jesuita con cascadas y valles, también esperan al paseante.

A escasos kilómetros y antes de llegar a tierras sinaloenses, la estación Temoris es la última parada en Chihuahua y es justo en este trayecto que se aprecian los mejores paisajes del recorrido, tales como cascadas, barrancos, puentes, 86 túneles y hasta los tres niveles de vía que conforman este ferrocarril.

Arribando a Sinaloa la primera parada de este singular medio de transporte es El Fuerte, Pueblo Mágico con atractivas construcciones coloniales y un majestuoso río.

Finalmente, el Chepe arriba a Los Mochis, próspera ciudad con rica gastronomía del mar. El visitante no puede perderse de un recorrido por Bahía Topolabampo sitio reconocido por ser un santuario de delfines.

Una ruta económica atraviesa los mismos puntos turísticos añadiendo entre ellos siete poblados más: La Junta, San Juanito, Pitorreal, San Rafael, Cuiteco, Loreto y Sufragio.

Comodidad y servicio

Durante todo el recorrido de El Chepe, los vagones de 64 pasajeros cuentan con cómodos asientos, zona de comedor con menú a la carta o alimentos rápidos, coche bar, aire acondicionado y calefacción para controlar las variaciones del clima exterior, y sanitarios con sistema ecológico.