Regalarse un viaje a Taxco es valioso en muchas maneras posibles, por ejemplo, para degustar su exótica gastronomía, que incluye los deliciosos insectos jumiles.
Pero lo es principalmente, para observar como, sus edificios novohispanos, sus calles empinadas, sus templos ornamentados y la perfección de sus artesanías en plata y otros metales preciosos, tienden o a lo más elevado o a lo más grato a los sentidos.
Por eso vale la pena conocer este Pueblo Mágico, el cual nos presenta mucho de lo más encantador que define a México.